Blas Infante, el padre de la patria andaluza, nació en Casares el 5 de julio de 1885. Aunque su andadura en la vida no fue muy larga, si estuvo muy ligada al pueblo de Casares. Todos los casareños lo tienen muy presente, ya que ha sido una de las personas que más han hecho por Andalucía y eso es todo un honor. Blas Infante, hijo predilecto de Casares.
Blas Infante
Blas Infante fue uno de los principales líderes del movimiento de Andalucía. Nacido en Casares en 1885, fue un destacado político, abogado, historiador, poeta y escritor. Fue uno de los principales promotores de la cultura andaluza y un defensor de los derechos de los andaluces.
Toda su vida ha estado ligada a Andalucía, aparte de ser un respetado abogado, también era un gran escritor. Escribió varios libros sobre la historia y la cultura andaluza. Su obra más conocida es el libro «Andalucía: Su Historia y Cultura».
También fue un gran defensor de los derechos de los trabajadores y fue uno de los impulsores de la ley de la jornada laboral, la cual otorgó horarios legales para los trabajadores.
En su etapa como político luchó por los derechos de los andaluces, proponiendo varias leyes para mejorar las vidas de los mismos. Fue uno de los primeros en proponer el concepto de una Andalucía autónoma con una identidad propia. Blas Infante fue el autor de «La Carta de Andalucía», un documento que trataba de definir el concepto de Andalucía y sus aspiraciones como región.
También fue el primero en proponer la creación de la bandera andaluza y un himno, símbolos de orgullo para los andaluces.
A pesar de su gran trabajo, Blas Infante no vio su objetivo cumplido, ya que lo fusilaron durante la Guerra Civil, con 51 años.
Blas Infante fue un hombre de gran visión y de un gran amor por su tierra. Su legado sigue vivo en la cultura y en los corazones de todos los andaluces. Sus palabras y acciones inspiraron a otras personas a luchar por la libertad y la autonomía de la región.
Ser de Casares y recordar a Blas Infante es todo un orgullo, gracias a un casareño, podemos disfrutar de nuestra querida Andalucía como la conocemos hoy día.
Casares le aportó a Blas Infante una sensibilidad feminista y luchadora, un sentimiento antibelicista, un gran desarrollo de su sensibilidad y su pasión por la música, gracias al fandango casareño, su ecologismo militante promovido por su infancia rodeada de naturaleza en el pueblo y por último, su pasión por la historia y la arqueología se desarrollaron en su infancia investigando junto con su tío la ciudad de Lacipo.
Casares y Blas Infante, unidos para siempre.
